Ausencia

 Allí donde nace la ausencia te tiendes y acurrucas tu pena.

 En un albor de nimiedades tus palabras se entrechocan y rompen. 

 No fuiste exorbitantemente valiente para enfrentar nuestro infinito letargo.

 Ries, lloras y enmudeces

cuando te nombro tu carencia hueca.

Insondables laberintos de granito para escaladores invisibles.

Vestiduras rasgadas para un solemne paseo.

Se vertebran las verdades en cascadas de oscuridades,

tiembla tu cielo gris

y comienza la tormenta.

Tu voz relampaguea  y azota tu semblante..

 Allí donde nace mi ausencia me acurruco en mi pena.